Bajo el sol abrasador de julio
Como dice el refrán, en julio es gran tabarra, el canto de la cigarra. Los primeros chirridos se empiezan a escuchar en torno al solsticio. Con el calor sofocante de julio, los continuos chasquidos rítmicos que surruran las cigarras se hacen omnipresentes en el ambiente. Solo cantan los machos. Cuando te acercas, cuandos haces ruido, callan y se hacen invisibles. Camufladas entre los pinos se hace muy difícil fotografiarlas. Qué sería del verano sin la matraca de la chicharra. Bajo el sol de abrasador de julio, entre luces y sombras, seguimos documentando lo menudo, que siendo pequeño no es menos importante que lo grande. Fotos: C. Lara & Maite Salamanquesa común Montes de Tobarrillas "La distribución mundial de la salamanquesa común comprende todos los países ribereños del Mediterráneo Occidental, además de Portugal. Sin embargo, también hay poblaciones aisladas en puntos concretos del Mediterráneo Oriental, África y América, debidas a introducciones consecuencia de la...